Será Francia una de las dos selecciones que juegue la final del Mundial de Rusia 2018, el país galo superó a Bélgica en el partido de semifinal 1-0 con gol de cabeza de Samuel Umtiti tras un saque de esquina. Es la tercera vez en la historia que “bleu” alcanza ésta fase de competición, la primera en 1998 cuando ante Brasil se coronaron campeones del mundo, la segunda en 2006 cayendo ante Italia.
Francia se caracterizó por dar contragolpe, con un excelente Kylian Mbappé a la carrera y un inteligente Antoine Griezmann.
Los dos equipos llegaban sin haber concedido casi nada: Francia, apenas un empate contra Dinamarca en la primera fase y unos minutos a Argentina en octavos, antes de que la destrozara Mbappé.
Bélgica, unos octavos de sufrimiento y remontada épica ante la sorprendente Japón y una lección táctica en los cuartos a Brasil.
El gol francés en el minuto 51, no hizo sino radicalizar la estrategia que cada equipo había mostrado en el primer tiempo: Una Bélgica más agresiva y una Francia que apostaba a la contra. Una vez más en Rusia 2018 una jugada a pelota detenida resultó crucial.
Los belgas, se lanzaron en forma desbocada en busca del empate. Mientras que Francia se organizó mejor atrás y apostó a alguna transición rápida que les permitiera ampliar el marcador.
Un partido de semifinal que no defraudo, sin embargo el Arena de San Petersburgo no estuvo lleno, eso es algo que nadie entiende y que la FIFA, presuma en sus redes de los millones y millones de entradas que han vendido, sigue sin querer explicar, ¿a donde se fue la gente?, lo cierto es que emocionó el partido de principio a fin.
Así jugaron:
Francia: Lloris; Pavard, Varane, Umtiti, Hernández; Kanté, Matuidi, Pogba; Mbappé, Griezmann y Giroud.
Bélgica: Courtois; Alderweireld, Kompany, Vertonghen; Witsel, Dembele, Fellaini, Chadli, De Bruyne, Hazard y Lukaku.